quarta-feira, agosto 30, 2006

Hay que salvar el alma.

«Hay mucha gente desanimada por la política. Andan preguntando: “¿Qué tenemos que hacer?”. Algunos ni siquiera preguntan, sino que resueltamente dicen: “No hay nada que hacer.”
Para un cristiano, la respuesta es muy sencilla: hay que salvar el alma.
— ¿Y la Patria?
— Salvar la Patria también, de ese modo»
Tudo na A Casa de Sarto